Pediatras sustitutos en vacaciones y pasitos hacia atrás con la peque

Ayer llevé a Andrea a su revisión del segundo mes. Se encuentra en el percentil 75 de peso y en el 90 de talla. ¡La cosa va genial! Me dijo la enfermera. Le puso sus vacunitas, una en cada muslo (pobrecita). Aproveché y pedí cita también para el pediatra ya que estamos en la playa y no vamos todos los dias a nuestro pueblo y tenia unas cuantas dudas.

Pues entro y me encuentro que  nuestra pedriatra está de vacaciones y en su puesto hay un pediatra distinto. Lo primero que le digo es que habia acudido para hacerle unas cuantas preguntas que tenia. Me dice: pues dime dime. La primera es sobre unos granitos que le salieron a Andrea que ya se le mejoraron gracias a una crema que le compramos en la farmacia contra la dermatitis infantil. Pero de todas formas queria consultarle.

Y me dice:
- Vale ahora se lo miro... siguiente pregunta.
Sentí que tenia prisa por atenderme y cuando voy a algún sitio y me pasa eso me da mucha rabia y ya me pongo de mala leche.
Las siguientes preguntas fueron en relación a lo de darle algo más que pecho en verano. Me pregunta:
- Pero eso quien te lo ha dicho???
Le digo que familiares y amigos.

Me dice:
Pues no hagas caso. Siguiente pregunta.

CAsi que no me dejaba hablar y yo con un montón de dudas que se me quitaban las ganas de preguntar.
Al final le mira los granitos y el tema del cólico, le toca la barriga y nos dice lo de siempre:
- hacedle masajitos en la barriga así como los estoy haciendo yo para que expulse los gases.
Vale, y yo me quedo como diciendo... ya lo sabía que tengo que hacerle los masajitos y mas cosas que he tenido que hacer en momentos de desesperación (como la sonda).
A lo que yo voy es a que a veces me siento como una tonta. Cuando salí de la consulta me sentía como una madre de esas excesivamente preocupadas que piden cita en el pediatra día sí y día no y que dan el follón por donde van. Pero no... yo no soy asi.

En resumen. Que no resolví practicamente nada. Mi niña sigue con el cólico del lactante. Parecía que había mejorado pero desde ayer por la tarde ha vuelto la cosa a empeorar. Le toco la barriguita y noto todas las burbujas de gases, la barriguita muy hinchada y ella dolorosa. Encima, cuando le toco para hacerle los masajitos ella se empieza a poner nerviosa y empieza a tensar los abdominales, por lo que no puedo mover los gases para que los expulse. Le estoy dando los dos jarabes que me mandó el pediatra de pago (entero silicona y carminativo juventus). Con esos jarabes ella mejoró bastante pero ahora de nuevo ha vuelto a sentirse molesta. Y eso que ha comenzado cuando mi marido estaba en casa. Le ha pillado librando... si llego a estar sola... no quiero ni pensarlo porque los llantos me matan. Pueso soportarlos un rato pero me empiezo a poner poco a poco más nerviosa y al final termino hasta a veces llorando.

Y eso que yo empezaba a comentar que mi bebé ya era otra cosa...

MI VIDA
Pues me he dado cuenta que me está costando recuperar ciertas cosas de antes. Por ejemplo, el tema del gimnasio. En principio estamos en la playa y hay un pequeño gimnasio en la urbanización. bajo cuando puedo pero no me siento muy en forma. No es lo mismo que si voy a mis clases de spinning. Las echo de menos. Allí me marcaban un ritmo y no podía decir que no. Aqui me lo marco yo y a veces hago menos de lo que me gustaría. Con respecto a mi tiempo libre pues es todo para mi niña. LA gente me dice que no me desespere, que ya irá cambiando poco a poco la cosa pero han pasado dos meses y la dependencia es grande. El pechoo hace que no pueda practicamente salir a ningun sitio sin la preocupación de que pueda tener hambre. No puedo programar salir a ningun lado o quedar con alguien a alguna hora porque no se si a esa hora estaré preparada o le tocará darle el pecho. El otro día recogí en el mar una conchas y pensé en pintarlas para entretenerme jeje, como las niñas. Me encanta la pintura y el arte. Pero las conchas ahí están en un armario y las pinturas se secarán ya verás.
Cuando salimos con ella me suelo agobiar un poco cuando empieza a llorar por ahí en medio. No salimos a ningún lado, tan solo a la piscina una horita debajo de la sombra y con muuucha protección. La hemos bañado en una piscinita de niños pequeños y muy poco tiempo por el tema del sol. Tenemos cuidado de que no le de y me pongo de manera que mi cuerpo le tape el sol completamente. Va con su gorrito puesto. Cuando la sacamos de la piscina se queda muyyy relajada. ese momento me encanta, porque veo que ella está agusto no como cuando le da el colico.
Por la tarde hemos bajado algun dia a la playa pero no la bañamos por el tema del agua salada. Bajamos poco porque si hace viento no queremos que le de a ella y con el bebé es algo molesto. Tapándola todo el rato.
Por la noche no salimos nuuuunnnca. Siempre en casa. Con lo bueno que tiene que ser salir por el paseo y tomar un helado por ahi.
Ahora llora y tengo que dejar de escribir. En fin... mi peque ha dado pasitos hacia atrás. Habrá que aguantar. Me siento agotada tanto física como mentalmente. Pero ver esa vida, aunque sea tan solo llorando me da fuerzas para seguir adelante. Hay etapas en la vida y supongo que ésta hay que aguantarla.