GRACIAS




Gracias a todas las personas que forman o han formado parte de mi vida. Cada una ha aportado su pequeño granito de arena. Y ahora todas esas influencias configuran la esencia de mi ser. Soy así por vosotros. Soy así y nadie me va a cambiar. Pero soy así y voy cambiando cada día, modelándome, ajustándome, adaptándome. Así es el vivir. No me arrepiento. Y si me caí..... me he levantado.
YOLANDA

jueves, 14 de julio de 2011

2 meses y 10 dias: la siesta, ojala no la pudiera dormir

Seguimos en la playita, con nuestro sol, nuestras visitas cortitas a la piscina con protección factor 50, nuestro gorrito (ya llevo comprados 3 porque se le caen de la cabeza). Y allí llegamos. Antes hemos divisado desde nuestro atico si queda sitio en la sombra. Así que ponemos el freno del carrito y a relajarse. Primero se baña uno, después se baña el otro. A veces Andrea se echa una pequeña siestecilla antes del baño.

Mami Yolanda empieza a observar a todas las mamis. Observa como se las apañan con sus peques, que tipo de carrito llevan, cómo actuan ante ciertas situaciones como rabietas y demás, qué les dicen, a qué hora se van, cuando llegan, si van acompañadas de papi o no. Nunca pensé que me convirtiera en una verdadera inspectora de madres con hijos. 

Preparamos a Andrea para el bañito. Le ponemos el gorrito, el pañal bañador de hugies y ¡A LA PISCI DE NIÑOS PEQUEÑOS! 

¡UYYY! QUE FRESQUITA. Vamos poco a poco. Primero observo donde está el sol para ponerla de espaldas y que mi cuerpo la cubra. Después le mojo un poquito los pies, las piernas, vamos subiendo hacia la barriguita. Y la tía no HACE ASCO. Le encanta el agua. Una vez dentro le hago movimientos para que nade y se relaje. Después Papi nos espera con la toallita abierta para secarla bien. Y por fin el momento más esperado: SE QUEDA FRITICA EN LA TOALLA.

Por la tarde visitamos la playita a veces. Bajamos más trastos. Una vez alli mucha gente se queda mirando a Andrea y me pregunta el tiempo que tiene. Todo el mundo me dice que es muy espabilada, porque tiene unos ojos muy grandes con los que se pone a investigar el mundo, pero eso ya lo hacia desde paritorio. Hoy no la hemos bañado porque había medusillas muy chiquititas y me daba miedo que pudieran rozar o incluso hacerle mal el propio agua.

Pero el momento de la siesta ha sido hoy muy bonito. Desde hace días, cuando Andrea no duerme la siesta me pongo un poco de mal humor, más que nada porque voy muy muy cansada y despues de un baño en la piscina y haberme levantado tempranito con ella y no parar... pues no es que queira dormir pero por lo menos me gustaría descansar un poco físicamente.  Así que hoy, después de intentar con papi que durmiera en la cama con nosotros un poquito la siesta y no poder conseguirlo, no se si por los gases o sus historias de los cólicos y la caca, me he dicho: la siesta no puede convertirse en una situación que me cree mal humor. He cogido a la niña y me la he llevado al sofá. Me he acostado boca abajo y mirándola y hemos empezado a platicar. Entonces me ha dicho su AJOOOO, me ha sonreido y ha emitido varios ruiditos de los suyos.

Ha sido cuando he empezado a hacer pedorretas con la lengua y entonces me ha empezado a poner un careto de asustada.... jajaja. Me he empezado a reir a carcajadas y ella más asustada todavía. Sigo con las pedorretas, haciéndolas entrecortadas con carcajadas por la cara que me ponía. Pero lo alucinante ha venido después cuando de repente veo que Andrea intenta sacar la lengua y se ha empezado a cabrear porque no podia emitir la pedorreta. ¡ME INTENTABA IMITARRR!!Sigue con su lengua fuera dandole vueltas, enseñándome los lados y la parte central, otras veces me enseñaba la puntita solo. Y finalmente como no podía hacer la pedorreta ha dicho con la lengua medio fuera ¡¡¡PUUUUUFFF!! Ha sido realmente divertido. 

Entonces me he puesto a pensar yo sola.... fíjate... el cabreo que me pillaba algunos días porque no podía dormir la siesta y ahora digo... OJALA NO LA PUEDA DORMIR NUNCA. No quiero perderme nada de mi niña y cada día que pasa aprendo más de ella y con ella. Aprendemos juntas, nos adaptamos a la nueva vida, la mía y la suya, vivimos el presente, nos acordamos del pasado y el futuro que nos espera es incierto pero a su lado se que feliz. Un camino inexplicable, inolvidable, un camino de aprendizajes y sorpresas y un camino distintos cada día. No hay día igual al otro. La improvisación está presente porque con Andrea nunca se sabe si te montará la pataleta o se reirá con esos ojitos de buenaza... TEQUIERO MI NIÑA. Doy gracias por tener lo que tengo  y pido perdón por mis llantos y quejidos. Gracias a todas las personas que me han aguantado y que me aguantarán en el futuro. Pero a pesar de los pesares Andrea sigue creciendo y lo más importante... SIGUE CRECIENDO SANA Y FELIZ.

1 comentario:

Annie74 dijo...

Yolanda¡
Simplemente precioso.. me ha encantado tu entrada, me has emocionado.
Muchos besos¡