GRACIAS




Gracias a todas las personas que forman o han formado parte de mi vida. Cada una ha aportado su pequeño granito de arena. Y ahora todas esas influencias configuran la esencia de mi ser. Soy así por vosotros. Soy así y nadie me va a cambiar. Pero soy así y voy cambiando cada día, modelándome, ajustándome, adaptándome. Así es el vivir. No me arrepiento. Y si me caí..... me he levantado.
YOLANDA

viernes, 17 de agosto de 2012

RIGIDEZ Y COMPRENSIÓN

Aún me quedan algunos días de vacaciones.

Han sido unas vacaciones muy distintas a las del anterior verano. Ahora podemos hacer más cositas con nuestra niña. Pero dentro de poco playa y piscina pasarán a visitas por los parques y juegos dentro de casa.

Dentro de poco comenzaré a trabajar, después de dos meses en los que he podido disfrutar de mi hija, descansar, salir y pintar cuadros. Comenzará un nuevo curso escolar, en el que aún no sé si podré elegir un 3º de primaria que es lo que deseo. Hay varios compañeros que van delante mía para pedir y no sé exactamente si llegará gente con comisiones de servicios que se podrán por delante mía. Al menos tengo un trabajo, mi sueldo... que tal y como están las cosas no me puedo quejar. Ya me han bajado el sueldo 3 veces y me han dejado sin paga extra pero hay gente que está peor que yo.

El mar ha sido mi aliado este verano. Me relaja, me hace sumergirme en pensamientos positivos.

¡Cómo me gustaría poder pintar al natural, fijándome en el paisaje que tengo delante! Ojalá tenga tiempo, pues es una tarea pendiente.

Los niños me esperarán en las aulas. Habrá que empezar a preparar la clase con carteles de bienvenida y demás fotografías que inunden de alegría esa nueva etapa.

Volveré con energía, que de eso no me falta y con ganas de enseñar a los peques, aunque de todo esto también hay una parte dura.

Hay niños de familias desestrcuturadas, sin materiales, sin libros, sin apenas dinero para comprarse un chandan y unos zapatos. Tengo el privilegio de poder dar clase en un centro lleno de inmigración. El privilegio pues de ello aprendo todos los días.

A veces exigimos más de lo que ellos pueden dar. Hay que bajarse del carro y ponerse en el lugar del otro. Para ello, todos los años visito una tienda de chinos donde compro pinturas, gomas, lápices, cuadernos... etc, con el fin de entregarles a los niños que no pueden económicamente. La consejería ha recortado en becas y ayudas, así que es lo que toca. Pero no por ello van a dejar de aprender.

Desde que soy madre me he visto un gran cambio en mi forma de dar clase y de contemplar a mis niños. La rigidez la he dejado a un lado y he dado paso a la comprensión. Incluso he podido transmitir (o eso creo) que el aprendizaje es algo más que ponerse delante del libro y callar. Hay que motivar a los niños sino... el aprendizaje es una pesadez para ellos. Pero no es fácil motivarlos. Ello requiere un proceso de introspección con una misma. Las horas de casa me dan para cuidar a mi hija y para de vez en cuando plantearme y cuestionarme lo que hago día a día. Siempre me falta tiempo y a veces tiro del carro como puedo. Algo se llevarán de mi para su futuro.

Enseñar es un arte. Aprendamos todos.

1 comentario:

Carmen dijo...

Cómo me gusta lo que piensa y tu forma de educar,no cambies ; )
Por cierto,Andrea cada día más bonita!
Besos